El Festival de Poesía «Palabra en el Mundo»

25 Abr

La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Castrillón (Asturias) se suma a esta VI edición del Festival Internacional de Poesía, Palabra en el Mundo, con un programa que aúna poesía, música, escultura y otros formatos audiovisuales. Hacemos un llamamiento a los poetas y amantes de la poesía, para disfrutar todos juntos de un recital poético los días 11 y 12 de mayo en Valey Centro Cultural de Castrillón, en un abrazo poético con otros poetas y otras manifestaciones artísticas en distintos lugares del mundo.

Festival Palabra en el Mundo
Descarga el programa en PDF

A lo largo del mes de abril aún podéis enviar más poemas

25 Abr

Estimados poetas, cerrado ya el plazo de admisión de poemas para el recital del sábado 12 en Valey centro cultural de Castrillón, os recordamos que todavía existen convocatorias abiertas para la presentación de poemas, inscripción a talleres, citas, etc..

Los Poemas de la Semana recibidos en la biblioteca de Piedras Blancas a lo largo del mes de abril, podrán optar a ser difundidos durante la celebracion del Festival en Castrillón (11 y 12 de mayo) y a lo largo de todo el mes en diversos lugares de la localidad (paradas de bus, mercado, centro de salud, etc.) Algunos de ellos también serán leidos durante la celebración de Te Regalo un Poema (por vosotros mismos si asistís, o por delegación de la lectura a otros poetas).

Si estáis interesados en hacernos llegar un poema a esta sección (Poemas del mes de abril), por favor, indicad el nombre del autor y la autorización expresa a a la organización de su difusión cultural en el marco del Festival, sin ánimo de lucro, por cualquier medio (impreso, informático) y mencionandose la autoría del mismo.

Podéis hacerlo vía correo electrónico al correo de la biblioteca biblio_piedras @ ayto-castrillon.es indicando la sección Poemas del mes de abril.

Yose Álvarez-Mesa

25 Abr

ESPERANDO ABRIL

Abril me está esperando para darme tu tacto,
para ofrecerme el lado intacto de la noche.

Permíteme volver a ser la madrugada
repleta de luciérnagas lamiéndome la piel.

Si me pierdo entre el no
y la oscuridad
y el miedo
no dudaré en buscar el rumbo en tu mirada.

Abril me espera al fondo de las lluvias más cálidas
desatando los nudos de un febrero confuso.

Allí te esperaré con el alma en silencio
sin ocultar mi rostro ni disfrazar la luz.

Y comeré en tu boca la dulzura y el ansia,
y borraré en mi pecho la sombra de tu pecho.

Si marzo se detiene será porque le temes
a la única pregunta que queda por hacer.

Félix Blanco Sánchez

24 Abr

HUELGA

Un corte de pelo no demasiado corto por favor
Llegado el tren a donde se juntan las agujas

La mujer que todavía esté a salvo de ese ser
Que incorpora como suplente hombría

La mujer explicable por paradigma o rosa
De todos los rieles misericordiosos

Podría deducir entre otras cosas
El estado de ánimo que rumia el peluquero

Que la nación sucede al estado mayúsculo
Requiere algún tirón de pelo y no al revés

La clase media añora el jardín y riega
Los fines de semana su seguridad social

¿Querría presentarse ante la poesía financiera
Con el altruismo impropio de una doncella?

Quien me cedió aquel principio ferroviario
No tiene pelo porque se lo arrebataron

Los estilistas que sirven al mujerío ideal
Los homicidas cultos de la peluca

Los inventores extremos del querubín
Que vigila a mamá desde el espejo

Son seres humanos naturalmente
A nadie se le cae el pelo de vergüenza

No solo a quien ya consta en el paro absoluto
Como consecuencia de la iniciativa

Sino al recién afilado por la democracia
Que viene a suplir alguna imperfección

Un corte de pelo no demasiado corto por favor
Llegado el tren a donde se juntan las agujas

(Para Antonio Tabucchi, superviviente)

 

CABO DE PEÑAS

No soy sidrero aunque quizá lo sea otro día
Pero crecí poco a poco entre manzanas

Pommes d´arbre para ser más preciso
Y enamorado de la ilustración francesa

Subir a los árboles y degustar una de esas
Promesas que dora el sol que las imita

Sidrero es quien toma en cualquier momento
El principio y el fin de una curva periódica

Y reconoce enseguida la intención del oxígeno
Enmascarado en la hucha de la tierra

Saltar de las ramas personalmente achispa
Sobre el cristal escuálido de un vaso

Y allí pulverizado frecuentar tus labios
Y emitir la espuma de los días nostálgicos

Que se deslizan hacia el mar Cantábrico
Que los mineros sienten alborotado

Tal que filólogos ante el advenimiento
De esa palabra corriente y licenciosa

Veintiún centímetros entre la majestad
De la emoción que discurre y recapacita

La variedad es el arte en que la resistencia
Entrega a las olas el único pez redondo

Vestido de sal como todo concepto
En la batidora del pensamiento

Detrás del horizonte está el acto puro
Del habla metalúrgica de las manzanas

Y no sabe a miel ni a uva ni a naranja
Ni a confidencia ni a látigo ni a sombra

Pepa González

24 Abr

Y TAL VEZ PODRÍAS

Podrías morirte un poco.
No del todo, no digo mucho, un poco.

Lo suficiente para imaginarme de duelo.
Lo necesario para que el luto me inunde y media alma se me borre del cuerpo.
Podrías convertirte en difunto, por un rato, por un momento, unos minutos tan solo.
Cadáver.
Y así las lágrimas llenarían el vacío.
Así las voces se apagarían sin hacer ruido.
Así mi vida también se tornaría insonoro y débil silbido.

Podrías darme el gusto, podrías regalarme lo propuesto, podrías volverte ausente y así de esa forma… como única manera… al menos … tal vez y sólo así…
quizás Yo… podría.

 

YERMA

En cuanto te vayas y me dejes
Me iré secando
Como un manantial sin vida, Como un puerto sin naves,
Como una mina sin entrañas
Me iré secando

En cuanto digas las temidas palabras
Me iré secando
Como un árbol sin frutos,Como una cara sin sonrisas, Como un amanecer sin luces
Me iré secando

En cuanto salgas con valijas
Me iré secando
Como cuerpo sin alma, Como ventanales rotos, Como calles sin andantes
Me iré secando

En cuanto se borre tu aroma
Me iré secando
Como abejas sin colmena, Como rama sin verdor, Como tierra sin raíces
Me iré secando

En cuanto despierte sola
Me iré secando
Como paredes sin recuerdos, Como ave sin alas, Como muñeca sin vestido
Me iré secando

En cuanto te marches
En cuanto te alejes
En cuanto te decidas
Lo sé, lo supe siempre, me secaría.

Antonio Alfeca

24 Abr

MASS MEDIA

En este mundo hay formas de salir de este mundo sin salir de él;
Santa Sabelotodo siembra por doquier flechas, rótulos, enigmas
para tanto ser dudoso en su cosecha.
Le salgo al paso y ella me asedia
con un manto muy espeso, versicólor
(veinte años, rubia, alta, ojos verdes):
«Hace frío allá, toma el Camino por aquí y por aquí,
esto difiere de lo otro, seguro
sin duda yo haría lo mismo.

Todo fuera es nivola, todo la sombra de una mala profecía
y no hay causas sino Causa
para comer, para beber,
para extirparse las penas,
para teñirse de fucsia,
para anillarse el duodeno,
para perforarse el alma,
para hacerse desmontable
o también todo lo contrario.
Recibe a cambio una estupenda vida, única; ¡pero qué digo, la tienes gratis!
Y luego duerman, duérmanla y vean, y ardan
de deseo -ya dijo Píndaro
que al principio fue el fuego:
nosotros somos la chispa-.

Con nuestra abigarrada red Ud. podrá cooperar,
cómodamente sentado en el salón de tu casa,
desde cualquier ciudad, desde Seattle o Las Vegas,
en salvar a esos pobres niños del Sudán
que están en el puro hueso, los pobrecitos
-la verdad, y sin faltar a nuestro código ético de profesionales,
se parecen demasiado a esas chicas víctimas de la anorexia,
no sabemos por qué-.

Si alega un hastío injustificado
en sus momentos de árida incertidumbre,
si no experimentó la más absoluta normalidad
en esos días críticos,
o te abandonaron como un mal desodorante
tus seres queridos,
pondremos en marcha, en exclusiva para Ud.,
nuestra eficaz fábrica de sueños; claro está, declinamos
toda responsabilidad en caso de pesadillas
u otros efectos secundarios
aunque, sin duda alguna, lo lamentamos;
siempre actuamos de buena fe.

Le traemos, le llevamos,
le cambiamos el pistón,
le proveemos un buen cambio
y si tiene la desgracia
de algún fatal accidente
podemos remodelarle
hasta la base del cráneo;
y aún en el caso remoto
de que se le desmenucen
la tibia o el peroné
o una parte del encéfalo,
todo lo cubre el seguro:
quedará como clonado.

Siga nuestras indicaciones.

Le ofrecemos la luna y el sol,
dos relojes de charol
y mundos que no existen,
que ya no existen,
que aún no existen,
que no existirán
porque son de nuestro copyright.
Es que somos inimitables, inconfundibles,
tenemos un sello propio, genuino:
incluso podemos ser el cuerpo de Ud.;
¡mas Dios nos libre de privarle
del derecho de elegir
libre y responsablemente!»

Menos mal:
queda el consuelo de no morir
por imperativo legal,
aunque me despedazase una jauría de hombres
que alquilaran mi carroña
a servicios funerarios “La Esperanza”

y aunque cambiasen la frase
de Jesús en el madero:
«A Ti, Diosa, encomendamos nuestros productos.»
Se acabó. Todo está liquidado.

Xurde Álvarez

24 Abr

Al otru llau del silenciu
habita la súplica más dura.

Espero en ti.
Que me busques, que veas esta
enfermedá,
que me llames y qu’al pronunciar tu’l mio nome
yo nél
me reconoza.

Espero que desentierres l’orbayu
d’esta mirada, d’estos dos
pozos vacíos, d’estos dos
pozos secos.

Esta ye la única puerta
que t’abro.

Crucia’l quiciu.

Nun me dexes solu. Sabes
que crecí ente’l dolor. Sé
que tu yes esa pallabra
que corrixe la soledá. Sé
que tu m’esperes
al otru llau d’esti silenciu

onde habita escondida esta súplica

tan dura.

Áurea López

24 Abr

CON NOSOTROS

Están con nosotros cuando nos sentamos a la mesa
o cuando en el sofá leemos los periódicos.
Están con nosotros todo el tiempo
mirándonos desde un sufrimiento solitario.
Miran con espanto la tecnología
que les lleva de paseo a todas partes
pero a pocos corazones que deciden.
“Están tan lejos…”
oí decir a alguien una vez
después de una película sobre un pueblo refugiado.
Tan lejos que no entendemos muy bien
qué es lo que pasa
y acostumbrados al cine de diario
la insoportable realidad se convierte en ficción.
Seguimos al poderoso que reparte de sus logros migajas
bajo cuyo aparente brillo
cuánto dolor de otros aparece incrustado.
Aumentará nuestra obediencia y miedo
cuando nos abra la puerta de su celda
con quincalla adornada
y agacharemos la cabeza al pasar
con la vista hacia el suelo
donde las estrellas se exiliaron.

Edda Cavarico

24 Abr

MINICUENTO NATIVO

La herencia del yague florecido
llora sobre el maciso silente
de la cordillera
al frotar los cristales salinos
que caen del ojo
oculto
sobre la bestia humana
sobre el rugir del pueblo.

Edda Ottonieri de Maggi

24 Abr

¿QUIÉN HA DE CERRAR LAS HERIDAS?

¿Quién ha de cerrar las heridas

del pan negado al hambre que duele,
de los sabañones del alma
con gambetas de zapatillas gastadas,
del frío sin techo de los que no tienen techo,
del asombro agrandado en ojos vacíos
de resignado mirar,
en la honda tristeza de la meseta sepia donde mora el dolor?

¿Quién ha de cicatrizar las heridas

cuando se ha burlado la igualdad prometida,
hay mocos brillantes en mangas rotosas,
y no suenan violines en mover de ilusiones,
mientras una bola de trapo rueda potreros,
y deseados juguetes van hacia otras manos?

¿Quién ha de disimular las heridas

del llanto vertido ante ciegos espectros
buscando un vuelo que arañe la aurora ,
en marchitos rezos de vigías estériles?

¿Quién ha de borrar las heridas

del pájaro que no tuvo nido,
de mil miedos subiendo en barrilete
en el espacio de no ver el mañana?

Efímera niñez madurada en tinas de pesares,
sin sábanas bordadas con risas entre pliegues,
sellada por imposibles dioses, sin brújula,
y abandonado en el apostadero penumbroso,

de los eternos olvidados.

¿Dónde, la “otredad” con sabor a ayuda mutua?

CICATRICES DEL MISTERIO

Investidos de hipocresía insolente, los poderosos,

desandan adoquines sobre rotas caras de piedra viva.

Y en el seno social corrompido, se yerguen,

sobre mares gelatinosos de pútridas algas,

contaminadas de múltiples apariencias

que duelen huesos, poros… sangre,

cuando visten promesas…

Con puñal perforan ilusiones,

en brumosos tiempos de vergüenzas ajenas…

Un perverso silbido de siglos atraviesa el tiempo,

son los mismos aires que azotaron desde el génesis

y siguen en gira hacia todos los rincones…

Y es red, que hipnotiza, desde el parpadeo del alba…

Oblicua memoria de sacrificados, insepultos,

conformistas, sin quejido ni pelea
que agazapados siguen en pozos de ignorancia,
en miserable ironía, fetidez de podredumbre
y socavado tejido de la barbarie “civilizada”…

Veo a mis hermanos, en sórdida ignorancia,

sin futuro…
Y me pregunto:

¿El futuro será el hoy… y también el ayer,

en el trajinar de penitentes?

ESPEJO DE LA NOCHE 

La tarde ata los cordones de todas las veredas.

Yo me sujeto a un rayo de luz.

La luna nueva se vislumbra tímida entre racimos de sombras

Caigo improvisada sobre mi propia sombra

La calma se dimensiona con mudez de árbol quieto

Empiezo a entender su profunda nostalgia.

Las nubes se encogen sobre pájaros desolados.

Me enrollo sobre mi propia cavidad.

Pequeños pizcas se dispersan cual migajas de pan duro

y giran sobre los dinteles

con pretensión de invitarme a borrar mi pena.

Pero mi sangre late en mis arteria vacías.

Voy en busca de mi calor huyente.

Sólo encuentro espejos difusos.

Entre los pliegues de otro día la noche ha quedado desterrada

Yo, estuve la noche entera en busca de mis propios pedazos,

justo cuando la aurora se anunció entre ruinas